Decreto 28-10-2020 SARS-COV 2

Es con perplejidad que veo el decreto del 28-10-2020, por el que se actualizan y se aprueban nuevas medidas excepcionales en el marco de la situación de emergencia sanitaria causada por el coronavirus SARS-CoV-2, para continuar reduciendo la tasa de reproducción de la pandemia, entre otras razones porque el artículo 11 (agrupamientos y celebraciones) pretende limitar el artículo 16 de la Constitución, que queda limitado a la vez por el artículo 40 de la Constitución en el sentido de que la regulación del ejercicio de los derechos reconocidos en este Título sólo se puede llevar a cabo por ley.

Los derechos de los capítulos III y IV deben regularse mediante leyes cualificadas.

Tampoco entiende que el Consejo General ni siquiera haya instado un conflicto de competencias, porque las competencias han sido claramente invadidas.